lunes, 8 de diciembre de 2014

Insomnio

 "El sueño de la razón produce monstruos", según se desprende de un grabado de Francisco de Goya. Pero nada que suela distorsionar, exagerar o presentar más turbia la realidad que una noche de insomnio. Si las noticias locales y la información en general no acompañanan, entonces los monstruos se reproducen..No ayuda que la lluvia sea persistente a través de los días: entonces la combinación del gris oscuro del ambiente y la humedad que se cuela por cualquier rendija contribuyen a que nuestro universo se torne desesperanzador. El buen tiempo, aún cuando digan que el sol se lleva dentro, te invita a abrir ventanas físicas y mentales.

Yo suelo escribir por la mañana. Temprano. Ese primer café diario para empezar a caminar me lleva de la mano al ordenador, con el sonido de fondo de la radio y sus informaciones que parecen siempre nuevas a pesar de ser tan conocidas. Como ya he escrito tantas veces,la voz de Pepa Bueno es una especie de bálsamo para comenzar a trajinar.  Afuera empieza la vida despacio. Algún transeúnte madrugador. Pocos coches aún por la calle y la promesa de la lluvia, las nubes o el sol, según decida el tiempo. Uno nota que van pasando los años en la medida que se interesa tanto por las noticias meteorológicas. Los niños rara vez suelen preguntar qué tiempo hará. Supongo que será porque el calor de la vida les llega todavía en cantidades suficientes para no necesitar tanta luz externa. Como os decía, a esas horas tempranas casi siempre encuentro un atractivo especial  a los minutos que se avecinan. Energía en horas altas que alimenta esos propósitos que rara vez se cumplen al cien por cien. Pero siempre percibo cierta magia en el amanecer. Es como si las cosas buenas pasasen volando y dijeran: atrápanos. Todo está mejor de lo que piensas tras noches de almohada incierta .Se aclaran las dudas y cobran sentido muchos de los planteamientos que en la oscuridad parecían tan absurdos. Tal parece que los duendes hayan venido a resolver el desasosiego de la madeja enredada en que ves tu vida si el desvelo te lleva a pensar en exceso. La peor parte de tus matices asoma la cabecita en horas de insomnio y se aproximan los peores demonios.

Hoy - tal vez ya sea mañana, cosa rara para mí que me acuesto temprano y mucho antes cierro el ordenador- los duendes o los demonios me han invitado a comprobar qué saldría de mis dedos cuando la madrugada está lejos. Quizás una foto que me han enviado, unas palabras que he leído, el silencios extraño del terminar el día... me hayan privado de escribir otra historia diferente. .

Posiblermente los que seáis búhos estéis acostumbrados a esos ecos extraños de estas horas en que casi todo el mundo duerme, y esos pensamientos que aumentan los problemas con potente lupa sea para vosotros un efecto mañanero. Sea como fuere, buenas noches para todos. A  buen seguro que tendréis una buena historia en la que pensar. De lo contrario, siempre puedes imaginar una luna llena o un montón de constelaciones conspirando a tu favor. Aunque sea la nieve, que siempre alegra. Me cuentan que, en algunos lugares, el cielo está para ello.

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